Un nuevo estudio realizado por los investigadores de la Universidad de California descubrió que pintar los techos blancos o implementar recubrimientos reflectantes llamados "techos fríos" era el método más efectivo para enfriar las ciudades en los calurosos días de verano.
El estudio, publicado en GeoPhysical Research Letters, utilizó un modelo de clima urbano avanzado para comparar diferentes estrategias de gestión del calor urbano. Se vio que los techos fríos redujeron las temperaturas externas en un promedio de 1.2 grados Celsius en Londres, y en algunos lugares tenía el potencial de disminuir a 2 grados Celsius.
En contraste, los techos verdes y los paneles solares en el techo proporcionaron menos efecto de enfriamiento (promedio de 0.3 grados C). Aunque el aire acondicionado está muy extendido, se vio que Londres ha calentado el centro de 1 grado Celsius.